Primero prepara un puré de patatas, puede ser de bolsa o bien casero.

Después pasas las salchichas, yo las prefiero de carnicería, están más sabrosas que las tipo franckfurt, hazlas despacito y bien doradas. Cuando ya estén hechas, las pasas a una bandeja para horno, y le pones encima el puré.

Por encima queso rallado a voluntad, y a gratinar al horno.

Cuando veas que el queso está de tu gusto apagas el horno, y lo retiras.

Verás que el puré en contacto con la "grasita" de las salchichas, está de pecado.

Si utilizas aspirador de los que tiene depósito de agua, y te has quedado sin ambientador de los que nos venden para el aspirador, prueba a poner un chorrito de colonia fresca, yo utilizo la de los niños (marca de un conocido supermecado).
Limpias y ambientas a la vez, y a un precio muy atractivo.

Es inevitable encontrarnos pelos en alfombras, sofás y demás muebles tapizados, sobre todo si vivimos con animales domésticos.

Si quieres eliminarlos fácilmente, humedece muy ligeramente el cepillo del aspirador y verás como los pelos se recogen mucho más fácilmente y no se dispersan.

Si quieres eliminar cualquier rastro de tu paso por el cuarto de baño, enciende una cerilla de madera y déjala que se consuma.

Elimina todo olor que pueda existir.

Tienes que tener a mano siempre , en casa, o en el bolso si vamos fuera (hotel, casa de amigos, etc), una cajita de cerillas, y saldrás tranquila en estas ocasiones.

Siempre en alto y lejos de las manos de los niños.

01 Jabón de aceite de oliva
Cargado originalmente por Los jabones de Emily

Ya que ecológicamente es una locura echar el aceite sobrante por el fregadero (nos cargamos el medio ambiente sin querer enterarnos), cuando cambies el aceite de la freidora, o cuando te sobre después de hacer cualquier fritura, guárdalo en un recipiente.
Cuando tengas 2 litros,se puede hacer jabón casero y natural.
Compra sosa cáustica (se puede encontrar en Mercadona, o en droguerías). Mezcla la sosa con 2 litros de agua (del grifo). Remueves bien el combinado y lo dejas reposar alrededor de 24 horas.
Pasado este tiempo, coges el aceite, que ya habrás colado, y lo vas mezclando muy despacito con una cuchara de madera, y siempre en el mismo sentido.
Cuando el futuro jabón empiece a tomar un aspecto como el de un bodymilk paramos y lo dejamos enfriar. Iremos tocando el recipiente hasta que esté frío.
Se desmolda y lo cortáis a voluntad.
Yo además lo rallo y me sirve para la lavadora.
Me han dicho que se puede perfumar con limón, aceites esenciales, etc.

Vierta un puñado de flores de lúpulo en una taza de agua hirviendo.
Tápala y deja que repose 15 minutos. Cuélala después y añade un poco de miel o azúcar integral de caña para mejorar su sabor. Esta infusión se puede tomar hasta tres veces al día.
Las flores de lúpulo las podrás adquirir en herboristerias.

Si quieres que cada que vez abras el lavavajillas, deje de recibirte con un desagradable olor, prueba con poner medio limón (aunque sea lo que te queda después de exprimirlo), clavado en cualquier parte del lavavajillas.
Los malos olores desaparecerán, pero además, yo creo que mi vajilla, y sobre todo la cristalería sale mejor que sólo con los detergentes tradicionales.

Pon un poco de bicarbonato en el gel que utilices en la ducha diaria. Te pones un poquito en la mano y la repartes por el cuerpo.

Hace el efecto de un peeling corporal, arrastra las células muertas, dejando una sensación de tersura y suavidad, tal y como lo hacen los peeling cosméticos.

El bicarbonato es mucho más económico que los de marca, por lo que además, se puede utilizar casi a diario.

Probadlo y nos contáis cómo os ha ido.